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domingo, 2 de noviembre de 2014

AK-107 y el sistema de retroceso equilibrado

Arriba un AKM y abajo un AK-47,
encuentre las 7 diferencias :P

El fusil de asalto AK-47 fue el arma principal del Ejército Rojo desde 1949 hasta 1959 cuando comenzó a cambiarlos por una versión mejorada, más fácil y barata de fabricar, a la vez que 1kg más ligera. A esa versión se la conoce como AKM (Avtomat Kalashnikova Modernizirovanny) y es la más popular de la familia Kalashnikov, estuvo en servicio no solo en las FF.AA. soviéticas y del extinto Pacto de Varsovia sino que sigue en activo en multitud de fuerzas armadas ex-afines a la URSS y en otros grupos irregulares, guerrilleros, yihadistas, terroristas, separatistas, luchadores por la libertad y otras sub-clases de combatientes difíciles de catalogar por todo el mundo. Se han fabricado aproximadamente unos 60.000.000 de fusiles AKM y se siguen fabricando en incontables versiones, aunque a comienzos de la década de 1970 la URSS empezó a buscar un reemplazo que fuera capaz de disparar una munición más ligera y, por tanto, más controlable cuando se dispara en automático. A diferencia de la doctrina de fuego que aprenden los fusileros occidentales, los soviéticos empleaban el fuego automático como primera opción en caso de enfrentamiento, puede verse que los selectores de tiro de sus fusiles de asalto vienen preparados para pasar del 'seguro' directamente al modo 'automático' con un solo toque y luego, tras una segunda presión sobre el selector, se activa el modo 'semiautomático', así se entiende que mejorar el desempeño de sus armas al disparar en automático era una prioridad. Se dice que este requerimiento de aligerar la munición se debió al relativo éxito del calibre 5,56x45mm OTAN que venían disparando los fusiles M-16 desde los años '60. A mediados de la década de 1970 los soviéticos empezaron a reemplazar sus AKM por AK-74 en calibre 5,45x39mm. Continúa en servicio hasta el día de hoy bajo el nombre de AK-74M sumando numerosas modificaciones para simplificar los procesos de producción y mejorar los aspectos ergonómicos del AK-74 original. Pero las investigaciones para conseguir aumentar la precisión durante el fuego automático nunca se detuvieron.

La desestabilización que sufre un fusil de asalto al disparar procede de cuatro momentos bien definidos. El primero es cuando el proyectil comienza su aceleración dentro del cañón, pues la misma fuerza que le impulsa hacia adelante empuja al resto del arma hacia atrás, esto es el retroceso propiamente dicho. El segundo momento desestabilizador ocurre por el movimiento del cerrojo que se abre y comienza a recular para extraer el casquillo vacío pero también cuando vuelve a cerrarse introduciendo una nueva munición en la recámara. El pesado cerrojo en su recorrido hacia atrás y hacia adelante hace que el centro de gravedad del arma varíe. La tercera perturbación se da en el momento en que, tras recular, el cerrojo golpea contra el tope del cajón de mecanismos. La última fuerza que desequilibra el arma aparece cuando el cerrojo vuelve a su posición original tras el disparo y el ciclo de recarga, impulsado por el muelle de recuperación golpea la recámara antes de bloquearse. Con esto en mente, los soviéticos desarrollaron un sistema que se conoce como 'retroceso equilibrado', en inglés BARS (Balanced Automatic Recoil System) y en ruso 'equilibrado automático' (cбалансированная автоматика).

El 'retroceso equilibrado' mitiga los efectos de tres de las cuatro causas fundamentales de la desestabilización del fusil de asalto durante el disparo. Se fundamenta en la 3º Ley de Newton que dice que 'a cada acción corresponde una reacción de igual magnitud pero en dirección opuesta'. La siguiente animación muestra esquemáticamente el interior del fusil AK-107, uno de los sucesores del AO-38. En la parte superior del esquema se encuentra una barra de contrapeso en color anaranjado y justo debajo está el grupo del cerrojo en color gris. Cuando los gases (en rojo, detrás del proyectil) provenientes del cañón (en cian) inundan la cámara empujan el cerrojo hacia atrás y el contrapeso hacia adelante, el movimiento de ambos es sincronizado gracias a un piñón (el de color rojo oscuro en la animación) que impide a ambas piezas moverse independientemente. Cuando el cerrojo llega al final del recorrido hacia atrás es empujado por el muelle de recuperación nuevamente hacia adelante, arrastrando a la barra de contrapeso hacia su posición inicial. Gente que ha probado el AK-107 junto con el AK-74 y también algunos AEK-971 (es decir: gente que verdaderamente puede establecer una comparación) coinciden en que el sistema de 'retroceso equilibrado' ayuda a mantener el arma centrada sobre el blanco durante las ráfagas de fuego automático, reduciendo hasta en un 20% la necesidad de reapuntar, corregir o compensar.

Evolución de los fusiles con sistema
de 'retroceso equilibrado', nótese
que el tubo de gases es del mismo
largo que el cañón.
La invención de este sistema se le atribuye al ingeniero Pyotr Andreevich Tkachiev que lo presentó en su prototipo AO-38 (1965) para la fábrica TsNIITochMash. Luego, a principios de la década de 1970, el ingeniero Yuriy Aleksandrov lo incorporó en sus prototipos AL-4 y AL-7 que compitieron en el concurso del que salió triunfador el AK-74. La idea fue resucitada a mediados de los años '80 para participar en un concurso que pretendía reemplazar al AK-74, la empresa Kovrov MP presentó el AEK-971 que quedó por detrás del ganador: el AN-94 Abakan, debido a que este último podía hacer ráfagas de dos disparos con una precisión inigualable. En todos los demás apartados el AEK-971 era mejor que el AN-94... 0,5kg más ligero, más simple y mucho más barato de fabricar. Aunque el Abakan fue oficialmente adoptado por los soviéticos como arma reglamentaria, el colapso de la URSS y las dificultades financieras que acarreó, acabaron alargando la vida de los AK-74 hasta nuestros días. A finales del siglo XX y con las fábricas de armamento rusas convertidas al capitalismo, el sistema de 'retroceso equilibrado' volvió a aparecerse en los fusiles de asalto AK-107, AK-108 y AK-109 ya no solo pensando en llenar el lugar que dejaría la jubilación del veteranísimo AK-74 y sus variantes sino también en la exportación. Como nota curiosa hay que decir que las siglas 'AK' en AK-107 significan 'Aleksandrov Kalashnikov'. Recientemente en 2013 ha aparecido el MK-107, modernización del AK-107, que la empresa Saiga planea exportar hacia EE.UU. y otros mercados (civiles y militares) ávidos de fusiles de asalto que permitan personalizarlos acoplándole toda clase de accesorios en sus sendos railes Picatinny e intercambiando piezas no fundamentales como culatas y guardamanos por otras hechas a medida de los gustos de sus usuarios.

AK-107 con cargador de 60 municiones y visor óptico.
El soldado lleva buena parte del equipo del programa 'Ratnik'.

Los AO-38 y AL-4 no pasaron de la etapa de prototipos, sin embargo se produjeron pequeños lotes de AEK-971 para ser usados por el Ministerio del Interior ruso a principios del siglo XXI, hasta que en 2006 cesó definitivamente su producción. Algunos AEK-971 fueron fotografiados en manos de soldados de fuerzas especiales rusas durante el conflicto de Chechenia (1999-2003). El AK-107 ha sido incorporado a algunas unidades militares de la Federación Rusa para su evaluación junto con el AK-12 (una versión modernizada del AK-74) durante 2014 como parte del proyecto 'Ratnik' que pretende modernizar todo el equipamiento de la infantería rusa para finales de 2015. Aunque se le vió en algunas ruedas de prensa junto con otras piezas del equipo 'Ratnik', en Enero de 2015 el Viceministro de Defensa ruso, Yuri Borisov, anunció que el AK-12 sería el fusil de asalto definitivo para este proyecto. El Sr. Borisov reconoció que tal decisión fue difícil porque el AK-107 había estado a la altura pero finalmente se decantaron por el AK-12 debido a su relación calidad/precio. Los fusiles de asalto que usan el sistema de 'retroceso equilibrado' han cosechado una amplia trayectoria y en estos momentos son más fáciles y baratos de fabricar que hace 50 años, es una buena opción para una fuerza armada profesional o pequeños grupos de operaciones especiales. El tiempo dirá dónde se les volverá a ver, porque seguramente reaparecerán.

jueves, 27 de marzo de 2014

AK-46, toda leyenda tiene un comienzo

El AK-1, primer prototipo presentado por Kalashnikov
para el concurso de 1946.
Hay muchas páginas en Internet dedicadas a hablar sobre el AK-47 y su creador, muchísimas más que los nombran indirectamente en otros temas y una cantidad casi infinita de información sobre los diferentes modelos, copias y accesorios de la familia de armas creada por Mijail Kalashnikov. Opino que los AK-47 (y derivados) deben de ser el segundo tema más presente en Internet, justo después de la pornografía. A pesar de esta popularidad, poca es la información acerca del origen de estas armas, la mayoría de las fuentes indican que 'Mijail Kalashnikov diseñó el AK-47 mientras estaba ingresado en un hospital tras ser herido en la batalla de Briansk'... antes de iniciar esta investigación llegué a creer que el joven Mijail entró al hospital inconsciente, salió con un AK-47 debajo del brazo y fue directo a ver a Joseph Stalin, se bebieron un par de vodkas, dispararon a unas palomas desde la ventana del Kremlin, se bebieron otro par de vodkas y así empezó la fabricación en masa y la incorporación de este arma al Ejército Rojo. Nada más alejado de la realidad excepto, quizás, por lo de los vodkas. Veamos cómo ocurrió...

La versión final del 'subfusil lacado negro',primer arma
creada por Mijail Kalashnikov en un taller de trenes en 1942.

Según cuentan las memorias oficiales de Mijail Kalashnikov, fue en el Hospital de Evacuación Nº 1133 cerca de la ciudad de Yelets donde conoció a una gran cantidad de soldados de diferentes especialidades y entabló conversaciones acerca de las armas automáticas, propias y del enemigo. Pronto comprendió que el armamento portátil de la URSS estaba muy por debajo del alemán y no solo en calidad sino, más preocupante aún, en cuanto a cantidad... era común que varios soldados compartieran el uso de un único fusil. La 'Enciclopedia de la Armas' escrita por el armero zarista (y luego soviético) General Fedorov, que Mijail encontró en la biblioteca del hospital, le ayudó para empezar a crear sus primeros bocetos. Huelga decir que el joven sargento de carros era autodidacta. A principios de 1942 abandona el hospital y viaja hasta Matai, donde existían grandes talleres ferroviarios, enseñando allí sus bocetos a algunos antiguos camaradas del Komsomol (la rama de jóvenes del Partido Comunista) finalmente consigue que le permitan hacer uso de las máquinas, herramientas, materiales y hasta ponen a su disposición a algunos trabajadores para que le ayuden a crear un prototipo. Unos meses más tarde el 'subfusil lacado negro número uno' estaba listo y, contra todo pronóstico, funcionaba razonablemente bien. Al ver esto, un oficial del Partido, decidió enviar a Kalashnikov y su invento al Cuartel General de Registro y Alistamiento para que se lo enseñara a un Comisario. El viaje hasta la ciudad de Alma-Ata (hoy Kazajistán) fue largo, pero finalmente llegó hasta la oficina del secretario del Comisario donde explicó que él, un sargento de carros con licencia médica, había inventado un arma en un taller de trenes y venía a enseñársela. Y allí pasó lo que tenía que pasar: lo arrestaron, supongo que el secretario del Comisario pensó que el sargento Kalashnikov quería pasarse de listo y que si era tan apto como para fabricar un arma nueva también lo estaría para empuñar una de las que ya estaban inventadas e ir a defender a la Madre Rusia sin necesidad de escudarse en un certificado médico. Cuatro días estuvo 'a la sombra' hasta que sus amigos de Matai intercedieron para que pudiera llegar hasta el Comisario, este no tenía ni idea de armamento pero quedó impresionado por la iniciativa de Mijail, así que le mandó a que continuara con el desarrollo del prototipo en mejores condiciones en el Instituto de Aviación de Moscú (que había sido trasladado a Alma-Ata). Gracias a ese empujón y tras no dar pocos tumbos, a finales de 1942, es recibido por el General Anatoly Blagonravov, un experto armero que analiza el prototipo mejorado del subfusil de Kalshnikov y llega a la conclusión de que no vale para nada: es demasiado complejo y no ofrece mejoras respecto a otras armas en uso por el Ejército Rojo (me meo de risa solo de imaginar la cara que puso el bueno de Kalashnikov en ese momento). Sin embargo le envía a la Academia de Artillería de Dzerzhinsky con una carta de recomendación que, entre otras cosas, decía: 'A pesar del juicio negativo que he dado a su prototipo de subfusil en su conjunto, debo destacar el laborioso esfuerzo que el Camarada Kalashnikov ha realizado con amor y persistencia bajo condiciones locales extremadamente desfavorables. Durante su trabajo el Camarada Kalashnikov demostró un indiscutible talento diseñando el subfusil y eso tomando en consideración su insuficiente educación técnica y una completa falta de experiencia en la fabricación de armamento. Considero aconsejable destinar al Camarada Kalashnikov a estudiar a una escuela técnica, al menos para que realice los cursos iniciales para técnicos militares de acuerdo con sus deseos, como primeros pasos para su carrera en estos tiempos de guerra'.

En 1942 el Ejército Rojo capturó a los alemanes algunas 'carabinas ametralladoras' MKb.42(H), prototipos tempranos del famoso fusil de asalto StG44, que habían sido enviadas al frente oriental para ser probadas en combate. Junto con esas armas, los soviéticos también se hicieron con buena cantidad del nuevo cartucho intermedio alemán de 7,92x33mm Kurz. Para esas mismas fechas empezaron a llegar a Rusia las primeras carabinas M1 fabricadas por los americanos y enviadas para ayudar a combatir a los alemanes desde el este. Los expertos soviéticos del 'Comisariado Popular de Armamento' hicieron algunas pruebas y vieron las ventajas que podía suponer el concepto de munición intermedia, casi de inmediato formaron un comité liderado por el diseñador N.M. Elizarov con el objetivo de crear un cartucho similar para uso de las FF.AA. soviéticas. Para Noviembre de 1943 estaba preparada la primera versión de tal munición llamada 57-N-231 en calibre 7,62x41mm y plantearon la urgente necesidad de crear una familia de armas capaces de dispararlo. A mediados de 1944 una versión mejorada de este cartucho, llamado 57-N-231S, inició su producción en masa... había nacido el 7,62x39mm.

De arriba a abajo: Bulkin AB-46, Dementiev AD-46
y Kalashnikov AK-46.
En la primavera de 1944 llegó el primer integrante de la familia 7,62x39mm en la forma de la carabina semiautomática SKS mientras se seguían probando varios prototipos de fusiles de asalto, el que mejores resultados ofrecía era el AS-44 de Alexey I. Sudaev (diseñador del subfusil PPS), del que se produjeron unos miles para ser probados por las tropas de primera línea a mediados de 1945, justo al final de la 2GM. El AS-44 fue bien recibido por los soldados aunque resultaba muy pesado (más de 5kg en vacío). La comisión encargada ordenó realizar una segunda etapa de evaluaciones para ver si se podía pulir el diseño del AS-44 y aligerarlo, pero la repentina muerte de Sudaev (17/08/1946) paralizó esa operación y dejó sitio para nuevos proyectos. Dieciseis prototipos se presentaron a la convocatoria, en una segunda ronda solo quedaron seis, entre ellos el AK-46 (también llamado AK-1) de Mijail Kalashnikov. En Diciembre de 1946 y tras nuevos tests llevados a cabo en las instalaciones para 'Pruebas e Investigación de Armas Pequeñas y Morteros del Ejército Rojo' el AK-46, el AB-46 de un diseñador apellidado Bulkin y el modelo AD-46 de un tal Dementiev pasaron a la siguiente etapa. En Enero de 1947 se realizó otra evaluación en la que el AK-46 resultó descartado, pero Mijail hizo uso de sus contactos (otra vez) y presionó a la comisión evaluadora para que se le permitiera presentarse a la siguiente prueba con un prototipo mejorado, tuvo éxito. Entonces el sargento Mijail Kalashnikov decidió jugarse todas las cartas... bueno... en realidad, decidió mirar las cartas de los oponentes.

El comienzo de 1947 vio el rediseño completo del AK-46 (rebautizado como AK-47), cambiando el sistema de retroceso corto por un pistón de largo recorrido solidario con el cerrojo e incorporó un muelle de recuperación cautivo tal como tenía el prototipo de Bulkin. Redujo las piezas móviles y aumentó el espacio vacío entre el grupo del cerrojo y las paredes internas del cajón de mecanismos para reducir la fricción y el desgaste, tal como ocurría en el AS-44 de Sudaev. La idea de la palanca selectora/seguro que también sirve como tapa para evitar que entre la suciedad en el cajón de mecanismos posiblemente la copió del rifle deportivo Remington M8. El cajón de mecanismos con una gran abertura por la que discurre el cierre estaba presente en el prototipo de Dementiev.

Por si fuera poco, durante una entrevista concedida al periódico ruso Life.ru en 2009, el camarada Kalashnikov reconoció haber recibido alguna 'ayudita' de Hugo Schmeisser durante el proceso de diseño del AK-47, dicho articulo no aportaba mayores datos pero fue suficiente para iniciar una polémica que sigue hasta nuestros días, por cierto: el articulo en cuestión ya no esta disponible en Internet. Recordemos que el Sr. Schmeisser fue uno de los principales artífices del fusil de asalto StG44 alemán y que, una vez terminada la 2GM, recibió 'una propuesta que no pudo rechazar' por parte de las autoridades soviéticas para que colaborara en el desarrollo de nuevas armas. Dado el halo de secretismo que aun hoy rodea el diseño y desarrollo del AK-47, solo es posible conjeturar que el Sr. Kalashnikov se inspirara en el StG44 para fabricar un cajón de mecanismos de acero estampado (el del AK-47 original era mecanizado) pero para el AKM, la siguiente versión del AK-47. Pero las similitudes entre AK-47 y StG44 acaban cuando se examinan sus mecanismos internos, especialmente el cerrojo rotativo del alemán contra el bloqueo por rebaje del ruso.

Y aquí viene la pregunta que todos nos hacemos: durante las pruebas de 1947, estando rodeados de armas cargadas ¿a Bulkin y a Dementiev no se les ocurrió pegarle un tiro a Mijail por robarle las ideas? Posiblemente si... pero estaban en la URSS, donde las ideas no pertenecían a quienes las pensaban sino al Estado y donde era perfectamente lógico usar esas ideas en beneficio del pueblo y... ¿podía haber algo más beneficioso para el pueblo que contar con unos soldados bien armados?. De hecho, los mecanismos del AK-47 jamás fueron patentados ni dentro de la URSS, ni una vez desintegrada, ni en el extranjero.

Para Enero de 1948 la competición entre los prototipos de Kalashnikov AK-47, Bulkin TKB-415 y Dementiev KB-P-410 llegó a su fin. La cosa estaba muy igualada porque el KB-P-410 era bastante más preciso que los otros dos en modo semiautomático, el TKB-415 por su parte era más controlable en fuego automático (el modo de disparo preferido por el Ejército Rojo hasta el día de hoy) mientras que el AK-47 superaba a los otros dos en cuanto a durabilidad y fiabilidad. Las autoridades del comité de evaluación decidieron entonces que era mejor tener un fusil de asalto capaz de soportar las más adversas condiciones sin atascarse que cualquier otra cosa y así dieron luz verde para que el prototipo del sargento Kalashnikov entrara en la cadena de montaje y se convirtiera en el fusil de asalto más famoso del siglo XX. Personalmente, me siento más tranquilo después de saber que el AK-47 es el fruto de un largo proceso de diseño más que de una iluminación divina.



domingo, 26 de enero de 2014

StG44, AK47 y el cartucho intermedio

StG44 y AK47, a simple vista sí que se parecen.
Tras la reciente muerte de Mijail Kalashnikov (10/11/1909 - 23/12/2013) han cobrado cierta virulencia los comentarios de foristas en Internet que ensalzan las virtudes cuasi-divinas de los fusiles AK47 y de aquellos que los denostan blandiendo el argumento de que son solo una copia soviética de los StG44 alemanes. El objetivo de este artículo es presentar algo de información real sobre las circunstancias que rodearon el advenimiento de estas dos armas para que ambos bandos tengan argumentos un poco más sólidos para debatir. Desde que Internet asegura el anonimato mucha gente dice lo primero que le viene a la cabeza sin molestarse en corroborar que lo dicho no constituye una ofensa para la inteligencia de quien lo lee o para la suya propia.

Armamento individual de un pelotón de infantería
americano de la 2GM. De arriba a abajo, los dos
primeros son fusiles, el tercero es un fusil ametrallador,
el cuarto es la carabina M1, quinto y sexto son subfusiles.
Y todos ellos pueden ser reemplazados por un fusil de asalto.





Veamos un poco de historia, que nunca viene mal. Hasta la aparición del fusil de asalto los pelotones de infantería de los bandos envueltos en la IIGM disponían de fusiles que eran efectivos a distancias de unos 700~800 metros (y más) gracias a su munición y largo de cañón, pero su cadencia de disparo era lenta debido a que la mayoría funcionaba por acerrojamiento manual siendo solo unos pocos modelos semi-automáticos como el Gewehr 41 alemán, el M1 Garand americano o los Tokarev SVT-38 y SVT-40 soviéticos pero, en cualquier caso, estaban pensados para hacer fuego bien apuntado, de ahí la escasa cantidad de munición que alojaban sus cargadores. Para aumentar el volumen de fuego que un pelotón podía usar contra el enemigo se utilizaban ametralladoras ligeras o fusiles ametralladores en el bando aliado y ametralladoras polivalentes en las fuerzas del Eje. Estas armas disparaban la misma munición que los fusiles pero en forma de ráfagas automáticas, encargándose de suprimir al enemigo mientras la infantería hacía fuego preciso o maniobraba para flanquear al adversario. Para el combate cercano, ya fuera en trincheras o en entorno urbano, se confiaba en los subfusiles. Estas armas son de un tamaño inferior a la de los fusiles lo que facilita su uso en sitios cerrados y son capaces de hacer fuego automático controlable gracias a que disparan munición de pistola, algo muy valorado cuando hay posibilidades de encontrarte al enemigo a pocos metros. Sobra decir que la potencia y precisión de los subfusiles hacía que fueran poco menos que inútiles a distancias superiores a los 100 metros. El armamento de los pelotones de infantería de los ejércitos de la época se conformaba mezclando estos tres tipos de armas entre sus soldados para conferirle cierta flexibilidad al conjunto.

De izquierda a derecha: .30 M1 Carbine,
7,92x33mm Kurz (del StG44) y
7,62x39mm (del AK47).
El nacimiento del fusil de asalto tal como se conoce actualmente está íntimamente relacionado con el concepto de "cartucho intermedio", es decir: munición más pequeña y con menor retroceso que la de fusil estándar pero con mayor potencia que la de pistola. Todas las pruebas llevadas a cabo por los alemanes, rusos y americanos más o menos por las mismas fechas para crear un arma individual capaz de hacer fuego selectivo (semiautomático y en ráfagas automáticas) usando la munición de fusilería convencional acabaron lléndose al traste debido no solo al excesivo retroceso para un arma que debía ser más ligera y manejable que una ametralladora, sino también al stress que producía en sus componentes y al desmesurado peso y tamaño de sus cargadores. Así que, sin cartucho intermedio, no hay fusil de asalto. Si hurgamos un poco en la historia veremos que todas las potencias militares de la primera mitad del siglo XX hicieron sus experimentos para evaluar la viabilidad de tal concepto.

No, no es el Führer quien está probando este StG44, se trata
de un oficial de la Luftwaffe, la insignia de la gorra le delata.
Hay evidencia de que ya en 1918 un responsable de la Gewehrprüfungskommission (el comité de desarrollo de armamento) remitió una carta al Cuartel General Alemán recomendando la creación de un nuevo cartucho, no tan potente como el 7,92x57mm de los fusiles Mauser pero con mayor alcance que el 9mm Parabellum empleado en el subfusil MP-18. Los mandos alemanes dejaron la carta guardada en un cajón y se olvidaron del tema arguyendo que ya tenían suficientes complicaciones logísticas como para añadir un nuevo cartucho y un nuevo tipo de arma a las fuerzas armadas. Similar razonamiento pasó por la cabeza del Führer quien no autorizó el desarrollo del StG44 desde el principio, solo gracias a algunos subterfugios burocráticos orquestados y ejecutadas por gente como el destacado ingeniero Hugo Schmeisser se pudo continuar el desarrollo del cartucho intermedio y el arma capaz de dispararlo en forma prácticamente clandestina dentro de la alemania nazi. Una vez que Hitler vió los resultados obtenidos por las pruebas de campo de los prototipos no solo autorizó la construcción de más armas de este estilo, sino que lo bautizó con el rimbombante nombre de "SturmGewehr" (fusil de asalto) y lo anunció como una de las armas que llevarían a Alemania por el camino de la victoria, claro que eso fué en 1944... poco margen quedaba ya para que el fusil de asalto cambiara las tornas. 

El M14 es la evolución del M1 Garand, puesto en servicio por los USA en 1956.
Lo curioso es que llegaba a manos de los soldados sin capacidad de hacer fuego
automático, tal característica se activaba usando una llave especial que solo
portaban los sargentos de pelotón.
Por su parte, el US Army convocó un concurso para incorporar armas capaces de rellenar el hueco entre las pistolas y los fusiles ya en 1938. El resultado fue la adopción de la carabina M1 en 1942, aunque cumplía con su rol de arma "intermedia" no puede ser considerada un fusil de asalto, primero porque originalmente solo podía hacer fuego semiautomático, luego su munición, llamada .30 US Carbine (7,62x33mm), es apenas más potente que la de pistola usada por entonces y anda muy lejos de las propiedades balísticas del 7,62x39mm soviético del AK47 y del 7,92mm Kurz del StG44 alemán. Terminada la IIGM los americanos no continuaron la búsqueda del cartucho intermedio por alguna razón que convendría analizar en algún futuro artículo, lo que hicieron fue cambiar su cartucho normalizado de infantería del 30-06 (7,62x63mm) del M1 Garand al 7,62x51mm del M14 y la mayor parte de los países bajo su influencia hicieron lo propio, hoy ese calibre se conoce como 7,62x51mm OTAN. Esta tendencia dió lugar a que en el mundo occidental se adoptaran armas de infantería conocidas como "Rifles de Batalla", en esta categoría entran el FN-FAL belga, el G3 alemán y el CETME C español. Este término despierta controversia pues para muchos expertos aquellas armas también son fusiles de asalto a pesar de disparar una munición sobrepotenciada para las condiciones de combate modernas y de que a algunos modelos se les ha restringido la capacidad de hacer fuego automático, dos características fundamentales de cualquier fusil de asalto. No fué hasta la década de 1960 cuando USA vería las ventajas del "cartucho intermedio" incorporando a sus filas la más famosa y publicitada de sus armas: el M16. Y volvió a influir en los países amigos para que adoptaran el nuevo cartucho de calibre 5,56x45mm que actualmente es el estándar de la OTAN.

Este es uno de los prototipos Sudaev AS-44, se dice que el Sr. Kalashnikov
incorporó una parte fundamental de sus mecanismos a su AK47.
De regreso al pasado, en 1943 los soviéticos comenzaron a hacer pruebas para hacerse con un cartucho intermedio. El primero que llegó a cosechar cierto éxito y abrió la puerta a posteriores desarrollos fue el calibre 7,62x41mm usado en el prototipo AS-44 de Sudaev. Curiosamente, los tests de esta munición soviética y los primeros prototipos se probaron unos meses antes de que Adolf Hitler se enterara de que su propia industria armamentística estaba desarrollando un fusil de asalto. Para finales de 1944 los soviéticos empezaron a hacer pruebas de campo del cartucho de 7,62x39mm en las ametralladoras RPD y las carabinas SKS, unos años más tarde este se convertiría en la munición del fusil AK47

Analizando la andadura del "cartucho intermedio" solo queda concluir que los ejércitos más importantes del mundo a mediados del siglo XX se dieron cuenta de que su armamento individual de infantería debía ser modernizado para adaptarse a la gran movilidad que habían ganado gracias a los vehículos a motor, los aviones de transporte, los paracaídas y los grandes buques de desembarco. Buscaron soluciones a ese problema y llegaron a conclusiones similares, los alemanes fueron los primeros en desplegar sus fusiles de asalto gracias a múltiples factores políticos, económicos e industriales, pero el concepto había estado dando vueltas por las cabezas de muchos ingenieros y teóricos militares de diferentes naciones incluso antes de que estallara la IIGM.

viernes, 14 de septiembre de 2012

Vektor CR21, el fusil del 'Guerrero Africano'

Vayamos por partes: el de la foto es el fusil Vektor CR-21 (Combat Rifle for 21 Century, o sea: Rifle de Combate para el siglo 21), creado en 1997, ofrece unas interesantes características propias de todo fusil bullpup (con el cargador detrás del pistolete). Aunque lo realmente destacable de esta arma es su relación calidad/coste, un tema importantísimo en un país con problemas financieros endémicos, como es Sudáfrica, de donde procede.

En 1997 la Fuerza Nacional de Defensa de Sudáfrica (SANDF por sus siglas en inglés) hizo un llamamiento para modernizar sus fusiles de asalto R4 (y sus variantes R5 y R6). En esa ocasión Vektor presentó su CR-21 pero el programa fue cancelado por falta de fondos y Vektor metió su CR-21 en el congelador, excepto por unas pocas unidades que llegaron al mercado civil y que pueden verse en acción en algunos videos de youtube y en la película "District 9".

En 1999 Sudáfrica dió inicio al programa "African Warrior" para la modernización de sus FF.AA. Nico Ras (encargado del programa "African Warrior" en la empresa Armscor) fue entrevistado en 2008 y reveló algunos detalles. Dijo que, debido a razones económicas, el programa se estaba abordando en diferentes fases y en 2014 se iniciaría aquella en la que se modernizaría el equipamiento de infantería. Las condiciones que deberá cumplir el armamento de los soldados están en evaluación, pero ya han calculado que en 2020 un 50% de la población de Sudáfrica vivirá en ciudades densamente pobladas ya que tiene una tasa de crecimiento diaria de entre 3.000 y 5.000 personas. Eso obligará a contar con fusiles de asalto lo suficientemente compactos como para ser empleados con comodidad en entorno urbano, pero que dispongan de un buen alcance (entre 300 y 600m) por si deben ser desplegados en las afueras, donde aún vivirá el otro 50% de la población. Esos fusiles deben tener posibilidades de montar accesorios de puntería y vigilancia diferentes que puedan ser intercambiados según la naturaleza y el entorno de la misión. Debido a que se espera que la infantería se enfrente a una gran variedad de enemigos, desde milicias locales, ejércitos regulares vecinos, fanáticos religiosos, civiles descontentos, mujeres y niños soldado reclutados por señores de la guerra o mafiosos, etc. se ha hecho especial hincapié en el uso de aquellos dispositivos de puntería que mejoren la "Conciencia Situacional" (o sea: que permitan que los soldados controlen con mayor atención lo que ocurre a su alrededor), incluso se ha barajado la posibilidad de utilizar dispositivos de puntería que puedan usarse con ambos ojos abiertos. La necesidad de que los fusiles de infantería puedan ser utilizadas como armamento "no-letal" sin necesidad de recurrir a otro tipo de armas también se ha puesto sobre la mesa y se contempla el empleo de dispositivos "no letales" lanzados desde un lanzagranadas incorporado bajo el cañón o una suerte de "taser" montado en el soporte para bayoneta... y la propia bayoneta ya que Nico Ros no la considera un arma letal.

Y ahora viene la parte buena: el propio Sr. Ros asume que, por razones económicas, no se podrá adquirir un nuevo fusil de asalto, así que deberán adaptar los actuales R4, R5 y R6, que están en servicio en Sudáfrica, para que cumplan esos requerimientos. 
Vektor R4 con cargador de 50 municiones y bípode integrado para usarlo como ametralladora ligera.

Ojo: esos fusiles no son para nada malos. Una de las cosas buenas de los "R" es su fiabilidad, recordemos que son copias locales, producidas bajo licencia, de los famosos fusiles israelíes IMI Galil ARM (R4), SAR (R5) y MAR (R6) de 5,56x45mm OTAN. Los Galil solo fueron adoptados por Israel en pequeñas cantidades porque coincidieron en el tiempo con varios lotes de M16 que el Tío Sam les vendía a precio de saldo. 

Arriba: carabina R5, versión recortada del R4.
Abajo: R6, versión muy recortada del R4. 
A su vez, esos ingenios israelíes, están basados en el sistema sobradamente fiable de los fusiles Kalashnikov, particularmente del AK-47, pero adaptados para disparar la munición estándar de la OTAN. Un defecto que suele achacársele a los Galil y, por ende a los "R", es su baja precisión comparada con otros fusiles de su época. Pero ese es un defecto propio del sistema Kalashnikov y no es realmente un problema si son usados por soldados con una pobre instrucción que tampoco podrían sacarle partido a un fusil más preciso.

Entraron en servicio en Sudáfrica en la década de 1980 y reemplazaron a los fusiles R1, R2 y R3, que son  copias locales del belga FN-FAL. 


Con todo esto en mente, me permito vaticinar que el CR-21 estará muy presente en Sudáfrica en un futuro. La principal razón para ello es que el CR-21 no es un fusil de asalto en si mismo, sino que es un marco plástico en el que se enfunda un R4 al que se le despoja de la culata, palanca de montar, elementos de puntería, tapa del cajón de mecanismos y se consigue dotarle de ergonomía, recortar su longitud en casi 30cm con respecto al R4 pero manteniendo su mismo alcance y precisión, añade un visor reflex con retícula iluminada por tritio de 1x aumento que permite apuntar con ambos ojos abiertos o, si se desmonta, un rail picatinny. Además, el guardamanos delantero es desmontable y permite acoplar un lanzagranadas con el que queda espantosamente feo como vemos en la  fotografía de la derecha. En la culata lleva un kit de limpieza que nunca viene mal y, según dijo Vektor en su día, la bocacha del cañón reduce de tal forma el fogonazo que no se ve ningún tipo de destello aún por la noche y puede ser empleada para impulsar granadas. Pero la característica más interesante para un país empobrecido es justamente la posibilidad de reutilizar toda la infraestructura productora de armamento ligero con mínimas modificaciones o, aún más barato, transformar sus actuales fusiles R4 en CR-21 aprovechando todas las piezas de recambio disponibles, los cargadores (de 20 y 35 municiones) y la munición.

Por supuesto, no todo son ventajas. El CR-21 no es apto para tiradores zurdos y no tiene ninguna posibilidad de serlo, ya que es imposible cambiar de lado la ventana de expulsión de las vainas vacías sin modificar físicamente el cajón de mecanismos y el cerrojo del R4. Pero tranquilos: otros fusiles bullpup desarrollados desde cero (como el SA80/L85 británico o el SAR-21 de Singapur) que han tomado años de desarrollo y costado toneladas de dinero tampoco permiten ser empleados por tiradores zurdos. Otra pega es que el selector de tiro que permite disparar en modo semiautomático o plenamente automático queda embutido en la culata, muy cerca de la cantonera, en una posición bastante incómoda que limitaría la posibilidad de cambiar el modo de disparo en una situación de stress.

Vektor ha presentado algo más que un arma, ha demostrado que prácticamente cualquier fusil convencional puede ser modificado y adaptado para convertirlo en bullpup y disfrutar así de las principales ventajas de este tipo de armas pagando solo una fracción del coste que acarrearía desarrollar un arma nueva con esa configuración. Es obvio que este invento no le hará mucha gracia a las principales compañías de armamento, pues obtienen más beneficios en desarrollar, vender y mantener un arma nueva antes que un armazón plástico. Los países emergentes deberían tomar nota. Si bien no hay noticias frescas sobre el CR-21 ni sobre el programa "African Warrior", circulan algunos rumores en la red indicando que Vektor creó una versión más corta del CR-21 que permite convertir las carabinas R5 en bullpup. También se dice que a principios del año 2012 la SANDF solicitó a Vektor 100 unidades de CR-21 para ser probadas por efectivos de las Fuerzas Especiales Sudafricanas y que, en base a esas pruebas, Vektor está rediseñando el CR-21 para mejorar sus puntos flacos. El tiempo dirá.